La artista Maria Marino trae el famoso estilo a la actualidad
Ya sea que conozcamos a una persona o veamos un lugar por primera vez, las impresiones son las que se quedan con nosotros. Cuando reflexiono sobre una persona o un lugar, busco una imagen clara, pero es la impresión la que siempre parece aflorar. Para pintar como un impresionista, el objetivo más importante es atraer al espectador desde lejos y crear un cuadro que le atraiga.
Se acercan cada vez más y se sumergen en las complejidades de la obra de cerca. Luego retroceden para obtener la impresión general una vez más.
¿Qué es una pintura impresionista?
Las pinturas impresionistas son siempre evocadoras. A veces están llenos de movimiento. A veces son tranquilas, soñadoras, inmóviles y reflexivas. No importa la sensación, siempre retratan una atmósfera de espontaneidad.
El estilo se presta a la creatividad y a la subjetividad y los ejemplos exitosos del estilo son obras que parecen tan frescas como el día en que fueron pintadas.
1 – Elegir el tema adecuado
A la hora de elegir el tema apropiado, éste debe hablarte. Busco un tema que me emocione y despierte algún tipo de sentimiento, ya sea tranquilo y sutil o que reclame la atención.
La intención es capturar siempre la belleza del mundo vivo – énfasis en lo vivo. Puedes usar una foto como referencia, trabajar en el estudio o en plein air. Trabaja como necesites ya que los detalles no son relevantes. Para pintar como un impresionista, busca una frescura que no esté sobrecargada y elige un tema que te parezca vivo.
Los impresionistas originales eligieron temas que eran relativamente ordinarios y los momentos eran fugaces. Pero la representación del momento era extraordinaria porque había un gran énfasis en el color y la luz. El tema puede ser relativamente cotidiano, lo que lo hace extraordinario es su representación.
2 – Mantener la periferia
En el proceso de pintar como un impresionista, es fundamental establecer primero los huesos de la pintura. Cuando pinto un cuadro impresionista al pastel, empiezo con un lápiz de carbón suave para establecer la estructura antes de poner cualquier color.
A menudo decido no dejar que mi atención se centre en el cuadro en su conjunto. En su lugar, mantengo el conjunto en mi visión periférica y me muevo por el cuadro con marcas para unificar las masas. Es entonces cuando doy un paso atrás y veo la composición global.
Es fundamental ver las masas en una composición, al tiempo que se establecen juntos el primer plano, el segundo plano y el fondo. La escala y el establecimiento de un punto de interés son también muy críticos. Si se hace esto deliberadamente, el observador entrará en el cuadro y viajará por todas sus partes. Explorando y a veces perdiéndose en la acumulación de color y luz.
3 – Marcas visibles y diversas
Una característica clave del Impresionismo son las pinceladas o marcas pequeñas y visibles que permanecen rotas y sin mezclar. El enfoque impresionista de la pintura es también como la respiración, poco elaborada e instintiva.
Tus pinceladas deben ser tuyas y resultarte naturales. Mantén los bordes suaves. Practica usando una variedad de trazos para obtener diferentes efectos y no trates de ocultar tus marcas. Por el contrario, enfatízalas en cada fase de tu pintura.
4 – Elecciones de color inesperadas
Cuando se establece la luz impresionista, el color y el movimiento (creados con trazos texturizados de varios tipos) se aplican capa a capa, tejiendo dentro y fuera como un tapiz. Es entonces cuando surge la composición. Con luz y color y más luz y color me esfuerzo por conectar zonas de un cuadro con una imagen global.
Los impresionistas también recurren al color sin mezclar y al color mezclado. Utilizar una variedad de colores para crear sombras y luces es una de las alegrías del impresionismo.
Una demostración de impresionismo
Vea cómo el cuadro impresionista al pastel de María Marino, El estanque en primavera, toma forma a lo largo de ocho fases, desde el dibujo al carbón hasta la colocación de sucesivas capas de color.
La impresión general
Al final, pintar como un impresionista consiste en conseguir que el espectador sienta más que entienda, que explore más que examine, y que ame la obra de arte que tiene delante más que la pase de largo. Explora el impresionismo desde tu propia perspectiva y para más recursos que te apoyen en tu camino, considera El secreto de la pintura al pastel en Plein Air con Michael Chesley Johnson o Aprende a pintar jardines al pastel con Jackie Simmonds.
And if you have an impressionist photo or picture you want to recreate in paint, soak up the techniques in this video to make sure you capture all the drama you can on canvas.