5 formas en las que la vergüenza puede moldear tu vida

La vergüenza es una emoción poderosa que tiene el potencial de moldear la vida de las personas de forma significativa. El diccionario Merriam Webster define la vergüenza como «una condición de humillación o descrédito». Las personas que experimentan vergüenza se sienten inútiles, avergonzadas, humilladas y sucias.

Las personas experimentan vergüenza por una serie de razones. La vergüenza se siente a menudo cuando alguien experimenta, comete o se asocia con un acto vergonzoso. Quizás el precursor más común de la vergüenza es el trauma. Cuando a una persona le ocurre algo terrible, suele sentir mucha vergüenza por lo ocurrido. También sienten vergüenza las personas que cometen delitos reprobables, viven en la adicción o experimentan enfermedades mentales estigmatizadas.

La vergüenza es tan poderosa que puede afectar a toda la trayectoria de la vida de una persona. Debido al poder de la vergüenza, es importante entender el impacto específico que tiene en las personas. Es importante considerar la manera de salir de la vergüenza.

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El Impacto de la Vergüenza

Aquí hay cinco formas en que la vergüenza moldea la vida de las personas.

  1. Las personas que viven con vergüenza a menudo evitan las relaciones, la vulnerabilidad y la comunidad. Las investigaciones demuestran que la vergüenza lleva a las personas a esconderse y ocultarse. Las personas que se sienten avergonzadas se esconden de la comunidad y de la amistad. Evitan la vulnerabilidad y nunca comparten su verdadero yo con el mundo.
  2. Las personas que viven con vergüenza son propensas a reprimir sus emociones. La vergüenza está asociada a la supresión de las emociones, especialmente en las mujeres. Las personas que se sienten avergonzadas de lo que son o de algo que les ha ocurrido suelen guardar sus pensamientos y sentimientos en su interior.
  3. Las personas que viven con vergüenza suelen sentirse inútiles, deprimidas y ansiosas. La vergüenza puede ser un factor que contribuye a la depresión, la ansiedad y la baja autoestima. Las personas que se avergüenzan constantemente viven una difícil batalla emocional y mental todos los días.
  4. Las personas que viven con vergüenza son menos propensas a tomar riesgos saludables. Una forma en que se ha conceptualizado la vergüenza es como «una defensa contra la desvalorización de los demás». La vergüenza impide que las personas tomen decisiones que podrían llevar a los demás a desvalorizarlas. A veces esto lleva a evitar riesgos saludables. Las personas que lidian con la vergüenza a veces sólo toman decisiones sobre el trabajo, las relaciones y la escuela que sienten que terminarán bien.
  5. Las personas que viven con vergüenza son más propensas a recaer en conductas problemáticas. Las investigaciones muestran que las personas que luchan contra el alcoholismo son más propensas a recaer en la bebida si experimentan vergüenza. Las personas que se avergüenzan de su comportamiento a veces continúan a propósito con ese comportamiento porque no creen que el cambio o la curación sean posibles. La vergüenza puede ser la razón por la que las personas deciden no dar pasos hacia la curación. Las personas que viven con vergüenza creen que no valen nada, por lo que a menudo comienzan a tratarse a sí mismos como si no valieran nada, involucrándose en comportamientos que saben que son malos para su salud y bienestar.

La salida de la vergüenza

  1. Busca relaciones y comprométete con la vulnerabilidad con personas seguras. Haz todo lo que esté en tu mano para encontrar una comunidad. La vergüenza empieza a desaparecer cuando se comparte en un lugar seguro.
  2. Sal de tu cabeza y sal al exterior. No lo guardes todo dentro. Saca tu vergüenza al mundo. Escribe sobre la vergüenza. Comparte tu historia de vergüenza. Crea obras de arte que representen tu vergüenza. La vergüenza encuentra la curación cuando se saca de nosotros mismos y se coloca en el mundo de alguna manera.
  3. Desarrolla la autocompasión. Considera lo que le dirías a un amigo que estuviera sintiendo lo mismo que tú. Comienza a responderte a ti mismo con amor, cuidado y preocupación, al igual que responderías a los demás con amor, cuidado y preocupación.
  4. Toma un pequeño riesgo. Intenta algo que pueda acabar en fracaso. Haz algo que sea difícil. O bien tendrás éxito y encontrarás la esperanza de que puedes hacer más de lo que pensabas. O bien, puede fracasar y darse cuenta de que el fracaso no es el fin del mundo. De cualquier manera, empiezas a encontrar la curación de tu vergüenza.
  5. Cree que la curación es posible. Tome una buena decisión en la dirección correcta y vea cómo se siente. Cree que puedes elegir tomar buenas decisiones una y otra vez hasta que tu vida cambie por completo.
  6. Uno de los mejores lugares para dar estos pasos es el asesoramiento con un profesional de la salud mental. Si la vergüenza está controlando tu vida, podemos ayudarte. Llame hoy mismo. Estaremos encantados de ayudarte en todo lo que podamos.
    Consulta gratuita

    Tangney, J. P., Stuewig, J. & Mashek, D. J. (2007). Emociones morales y comportamiento moral. Annual Review of Psychology, 58, 345-372

    La vergüenza sigue de cerca la amenaza de devaluación por parte de otros, incluso a través de la cultura. Proceedings of the National Academcy of Sciences of the United States of America, 113(10), 2625-2630

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