Cuando se piensa en Burdeos, lo primero que viene a la mente es el vino. Y no es de extrañar, con 60 denominaciones de origen y 7.000 bodegas, la ciudad es la capital de una región que alberga algunos de los viñedos más antiguos y los mejores vinos del mundo. Pero cuando se visita Burdeos, no se trata sólo de vino: el agua también es importante. Un paseo por las orillas del río Garona y el estuario de la Gironda revela cultura, naturaleza, enoturismo y encantadores castillos. Diríjase al sur para conocer el glorioso litoral, saborear ostras frescas y sentir la sedosa arena de la cuenca de Arcachon. Tómese el tiempo para ser y disfrutar de la alegría de vivir.
Los imprescindibles de Burdeos
Cuando visite Burdeos, sus arterias acuáticas le servirán de guía. Los fastuosos edificios que son herencia del antiguo puerto del siglo XVIII se extienden a lo largo de las orillas del Garona y sus muelles clasificados por la UNESCO, alrededor de la imponente Place de la Bourse y hasta el borde de la famosa escultura acuática el Miroir d’eau (espejo de agua).
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Cité du Vin – descubra los más grandes vinos
La ribera del río es un marco perfecto para el museo del vino Cité du Vin, la silueta de su espectacular arquitectura se refleja en el agua, reflejando el extraordinario diseño de este icónico edificio, que parece el remolino del vino en una copa, un verdadero matrimonio entre el agua y el vino. El museo del vino es perfecto para descubrir la cultura del vino, su bóveda de madera evoca la bodega de un barco, el método de transporte del vino en el pasado. Cerca de allí, el Musée Mer et Marine (Museo del Mar) parece casi flotar en el corazón del histórico puerto bordelés del siglo XIX, conocido como el barrio de los «bassins à flot». Este museo de 13.000 m₂ está dedicado a la inmensa historia del pasado marítimo de Burdeos, a su importancia para las fortunas de la ciudad… y a su vínculo con el Atlántico.
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Viaje por el río hasta el océano Atlántico
Para explorar la conexión de Burdeos con el Atlántico, remonte el Garona a la sombra de barcos ya desaparecidos. Por el camino, haga una parada en el estuario de la Gironda, el más grande de Europa con sus 635 kilómetros cuadrados de paisaje salvaje donde confluyen las aguas del Garona y la Dordoña. En Blaye, descubra la ciudadela encaramada en un peñasco. Diseñada por Vauban, el ingeniero de Luis XIV, esta fortificación defensiva clasificada por la UNESCO ofrece hoy en día talleres para artesanos y artistas e incluso un microviñedo ecológico de 15 acres.
- Descubra la bahía de Arcachon, un paisaje protegido
Después de su visita a la ciudad, diríjase al sur, a la bahía de Arcachon, y dese un chapuzón en el océano. Formado por las mareas, este paisaje salvaje de playas de arena y pequeños puertos ostrícolas es un patio de recreo sensacional para los amantes del mar y la naturaleza. Disfrute del aire fresco pedaleando por los bosques de pinos o suba al Mont Pilat: una duna de 109 metros desde cuya cima no dejará de asombrarse por las vistas panorámicas sobre las aguas turquesas de la bahía de Arcachon y la reserva natural de Pointe de l’Arguin.
Vinoturismo en los viñedos de Burdeos
Aunque esté rodeado de agua, también se encuentra en el corazón de los viñedos. Hay muchas cosas que hacer, no solo saborear los vinos de Burdeos, sino también el brandy AOC que se produce en las cercanías. Pero antes de ir a Cognac, cruce la frontera natural que forma la Gironda entre Blaye, en la orilla derecha, y los viñedos de Médoc, en la izquierda. Desde Margaux hasta Saint Estèphe, pasando por Pauillac, la zona vitícola del Médoc cuenta con 18 viñedos clasificados como grand cru. Al realizar la ruta del vino del Médoc también descubrirá algunos de los castillos más conocidos y bellos del mundo.
Cruceros y bienestar en Burdeos
Si quiere tomarse las cosas con calma en el río o relajarse en los viñedos, hay muchas escapadas inspiradas en el agua desde Burdeos hasta Blaye o Pauillac. En el estuario de la Gironda, navegue entre la isla de Margaux, donde los viñedos tocan el borde del agua, y la isla de Patiras, cuyo faro domina los castillos del Médoc. Y para relajarse, puede probar la vinoterapia. Sources de Caudalie es un balneario único, situado entre viñedos, que combina las virtudes de las aguas termales con los beneficios de la viña y la uva.