El término HVAC significa calefacción, ventilación y aire acondicionado, un sistema utilizado para controlar la temperatura en un espacio, así como la humedad y la calidad del aire. En un edificio grande, el sistema tiene que ser capaz de funcionar en función de las necesidades de confort, así como de las dimensiones del espacio. El sistema HVAC debe transferir el calor y la humedad dentro y fuera del aire para controlar el nivel de temperatura, así como el nivel de contaminantes del aire. Esto se hace eliminando los contaminantes directamente o diluyéndolos.
¿Cómo funciona un sistema HVAC?
Los componentes individuales de un sistema HVAC variarán dependiendo de la configuración dentro del edificio. Sin embargo, la mayoría de las unidades contendrán componentes básicos que incluyen lo siguiente:
- Calderas – La caldera se utiliza para producir agua caliente o vapor para distribuir el componente en todo el edificio. Esta agua caliente o vapor se producirá a través de serpentines de calefacción o tuberías de agua caliente.
- Equipo de refrigeración – El equipo de refrigeración de la unidad enfriará el agua dentro de los serpentines de refrigeración. El aire se sopla sobre las bobinas de agua enfriada y se utiliza en el espacio a través de un sistema de ventilación. Como parte de este proceso, cualquier calor se eliminará a través de un condensador o torre de refrigeración.
- Bombas – Se utilizan dentro del sistema para hacer circular el agua refrigerada y caliente a las zonas especificadas del edificio.
- Ventiladores – Se utilizan dentro de la unidad para eliminar el aire viciado a través de conductos separados y luego se colocan fuera del espacio.
Aquí hay un ejemplo de los componentes del sistema HVAC. Los sistemas de HVAC pueden variar según los componentes individuales y la forma en que se configuran en un edificio. Haga clic en la imagen para verla más grande.
Uso de energía de un sistema HVAC
Cuando se trata del uso de energía de un sistema HVAC, hay cinco factores en juego. El uso de la energía es importante, ya que desea utilizar la menor cantidad de energía posible, pero aún así enfriar y calentar el espacio. Una unidad energéticamente eficiente utilizará menos energía, por lo que su funcionamiento será menos costoso. Estos factores incluyen:
- Diseño del edificio, disposición y funcionamiento – Esto afectará a la temperatura interna y a la humedad del espacio.
- Temperatura requerida y calidad del aire – Se utilizará más energía cuando se necesiten temperaturas extremas junto con una calidad del aire refinada.
- Iluminación, equipos y personas – La iluminación utilizada, así como los equipos y las personas en el interior, serán un factor que contribuya al calor generado dentro del espacio.
- Diseño y eficiencia de la HVAC – Esta es el área en la que se necesita la calefacción, la refrigeración y el control de la humedad.
- Tiempo de funcionamiento de los equipos de HVAC y capacidad de control – Esto limitará el funcionamiento a cuando sea necesario para reducir el uso y el coste de la energía.
Hay muchos factores que deben tenerse en cuenta cuando se trata de crear un espacio confortable dentro de un gran edificio. Consultar con una empresa profesional de HVAC le asegurará que tiene el tipo de unidad correcta instalada. O, si está instalando el sistema correcto al crear un nuevo espacio o sustituir una unidad. Los profesionales en HVAC saben exactamente qué hacer para proporcionar un equipo óptimo para el control de la temperatura, la eficiencia energética y los desafíos de la humedad dentro de un espacio más grande.
Compartir Color Fire El 5 de septiembre de 2017 / Servicios HVAC
Etiquetas: sistemas HVAC diseñados, diagramas, calefacción, HVAC de oficina