Cómo mantener la salud de las articulaciones y prevenir la artritis

Mantener las articulaciones sanas y fuertes puede ayudarle a mantenerse activo.

A medida que envejece, el cartílago que rodea las articulaciones puede desgastarse o romperse. Esto puede desencadenar la artritis, un trastorno articular que causa dolor y rigidez debido a la inflamación de una o más articulaciones. Sin embargo, puede tomar medidas para proteger el cartílago existente y aliviar el dolor de las articulaciones – posiblemente retrasando o aliviando la artritis.

Comer bien. Llevar una dieta equilibrada -con una variedad de frutas y verduras- proporciona a las articulaciones los nutrientes que necesitan. Hable con su médico sobre qué vitaminas y suplementos pueden ayudarle.

Fortalezca sus huesos. Unos huesos fuertes ayudan a proteger sus articulaciones adyacentes. La vitamina D y la vitamina C desempeñan un papel importante para mantener los huesos fuertes, al igual que el calcio. Muchos adultos eliminan la leche rica en calcio de sus dietas en favor de las bebidas carbonatadas o con cafeína, pero los estudios demuestran que la cafeína puede debilitar los huesos. También se ha demostrado que fumar reduce la densidad ósea.

Llame para pedir una cita(800) USC-CARE (800-872-2273)

Mantenga su peso bajo control. Con cada paso que da, cada una de sus rodillas registra cuatro libras de presión por cada libra de peso corporal. Si pesa 200 libras, eso significa que cada rodilla soporta 800 libras de presión. Incluso una pérdida de peso de 10 libras puede aliviar 40 libras de presión y marcar la diferencia.

Muévete más. Las articulaciones anhelan el movimiento para combatir la rigidez. Cada vez que se estira o se dobla, el líquido articular nutre el cartílago vecino. Los expertos recomiendan una combinación de movimientos diarios, como caminar, estirarse y hacer ejercicios de fuerza. Las actividades aeróbicas mejoran el flujo sanguíneo, mientras que unos músculos más fuertes alrededor de las articulaciones pueden actuar como amortiguadores.

Consulte a un médico. Los esguinces o tensiones cotidianas suelen aliviarse con reposo y hielo. Sin embargo, si una articulación se hincha o causa un dolor importante, debe ponerse en contacto con su médico de atención primaria o con un cirujano ortopédico, especialmente si no mejora después de un par de días o se agudiza repetidamente. Un clínico puede ayudarle a evaluar sus opciones, desde medicamentos y fisioterapia hasta la sustitución completa de la articulación.

Los expertos del Centro de Conservación y Sustitución de Articulaciones de la USC ofrecen los últimos avances en la restauración y sustitución de articulaciones. Llame al (800) USC-CARE o solicite una cita para obtener la atención más adecuada a sus necesidades.

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