El patrón de repolarización precoz (PRA) es una variante común del ECG, caracterizada por la elevación del punto J que se manifiesta bien como un deslizamiento del QRS terminal (la transición del segmento QRS al segmento ST) o una muesca (una desviación positiva inscrita en el complejo QRS terminal) asociada a una elevación cóncava del segmento ST hacia arriba y a ondas T prominentes en al menos dos derivaciones contiguas. Se incluyeron 36 pacientes en esta observación. Se trata de 36 pacientes (de 19 a 68 años) con patrones de ECG de repolarización temprana. Todos estos 36 pacientes fueron divididos en dos grupos según su nivel de elevación del punto J. El primer grupo consistió en 12 pacientes con elevación del punto J ≥0,15 mV; el segundo grupo – de 24 pacientes con elevación del punto J <0,15 mV. Realizamos una monitorización de ECG de 24 horas a todos estos pacientes para evaluar el número absoluto de latidos ventriculares prematuros durante 24 horas. En el primer grupo (elevación del punto J ≥0,15 mV) la suma de latidos ventriculares prematuros fue de 27432, en el segundo grupo (elevación del punto J <0,15 mV) la suma de latidos ventriculares prematuros fue de 31 896. Los resultados de este estudio observacional muestran que hay un número 1,72 veces mayor de latidos ventriculares prematuros en el primer grupo. Así pues, una elevación del punto J igual o superior a 0,15 mV es más arritmogénica e induce latidos ventriculares prematuros. Este es un resultado principalmente nuevo y muy importante.