Mire con atención y es posible que vea los signos del paso del tiempo en la cara de su cachorro: un hocico grisáceo, una ligera opacidad en los ojos, la pérdida ocasional de dientes. Si se da cuenta de estos pequeños recordatorios de mortalidad, puede ponerse en marcha y comenzar un régimen vitamínico sólido.
Antes de hacerlo, asegúrese de que está tomando los suplementos adecuados. No malgaste su dinero en píldoras ineficaces, promesas de marketing vacías o tratamientos innecesarios. En su lugar, concéntrese en unos cuantos suplementos dietéticos recomendados por los veterinarios.
Ácidos grasos esenciales (Omega 3 y 6)
También conocidos como EFA, estos aceites son conocidos sobre todo por mejorar el estado general de la piel y el pelaje de su mascota. También son responsables de proporcionar una serie de beneficios antienvejecimiento como el aumento de la función cerebral y el refuerzo del sistema inmunológico. Los omega-3 y los omega-6 tienen impresionantes propiedades antiinflamatorias que son muy eficaces para disminuir el dolor y la gravedad de la artritis. Dado que el cuerpo de su perro no tiene medios para producir estas potencias, es importante que su alimento para perros totalmente natural se complemente con un aceite de pescado de alta calidad o equivalente.
Glucosamina con sulfato de condroitina
Especialmente si su perro sufre de dolor en las articulaciones, los compuestos que se encuentran en este suplemento antiinflamatorio y de retención de agua son insuperables. Ayudan a amortiguar los efectos, a menudo dolorosos, de la pérdida de líquido, que se produce a manos de la descomposición natural del cartílago. La glucosamina con sulfato de condroitina también se combina bien con los EPA para proporcionar una pareja completa que regenera el cartílago y lubrica las articulaciones.
Probióticos y prebióticos
Sabes que somos fans de los prebióticos y probióticos para perros. Estos cultivos vivos ayudan a proteger el delicado bioma del intestino, fomentando las bacterias saludables y ayudando a la digestión. Juntos, este dúo dinámico reprime las bacterias no saludables que pueden provocar enfermedades y ayuda a equilibrar los sistemas internos de su perro, desde el cerebro hasta los intestinos. Esto es importante, ya que las bacterias «buenas» pueden desaparecer fácilmente en el día a día con el estrés, los medicamentos y las enfermedades. Mantener estas colonias fuertes ayuda a defenderse de las enfermedades y de ciertas deficiencias autoinmunes. Sin estas fuertes maravillas bacterianas, los perros estarían indefensos frente a las enfermedades y serían inútiles para digerir los alimentos o absorber los nutrientes.
Unas palabras sobre el peso
Proporcionar a su perro una dieta equilibrada y rica en nutrientes es el primer punto de partida. Después de todo, de qué sirven los suplementos caros si su cachorro es obeso y corre el riesgo de padecer enfermedades cardíacas o diabetes.
En definitiva, la salud y el bienestar general de su perro es un compromiso para toda la vida. Sin embargo, a medida que envejecen, es probable que sus necesidades cambien. Si se combinan con una dieta saludable de alimentos para perros de alta calidad, un ejercicio adecuado y la crianza emocional, los suplementos pueden ayudar a los padres de mascotas y a los bebés peludos a vivir una vida larga y feliz.