Nuestro pájaro carpintero más pequeño y común en el Estado de la Bahía es el pálido. Llamado así por la suave textura de sus plumas traseras, los «downies» pueden encontrarse casi en cualquier lugar donde haya árboles. Sus patrones de rayas de cebra y su comportamiento laborioso hacen que sea un placer verlos, en los comederos o en el bosque.
Identificación
Los pájaros carpinteros downy son pequeños para los pájaros carpinteros, pero de tamaño medio para los pájaros de patio (un poco menos de 7″ de largo, en promedio). Su espalda tiene una amplia franja blanca en el centro, y sus alas negras están marcadas con barras horizontales blancas. Su cara también tiene rayas blancas y negras, y los machos muestran un punto rojo brillante en la parte posterior de la cabeza.
El pico del pájaro carpintero es pequeño pero afilado y robusto, como la punta de un cincel. Sus primos, los pájaros carpinteros peludos, tienen un aspecto casi idéntico, pero son más grandes, con picos más largos que fácilmente alcanzan la longitud de sus cabezas.
Comportamiento
Los pájaros carpinteros se pasan la mayor parte del tiempo agarrados a los troncos y ramas de los árboles con sus pies especializados. Los pies de los pájaros carpinteros son zigodáctilos: dos dedos hacia delante y dos hacia atrás, en lugar de los tres hacia delante y uno hacia atrás habituales en otras aves.
Los pájaros carpinteros escarban y picotean la corteza de los árboles en busca de insectos, y a menudo se arrastran hasta las puntas de las ramas más pequeñas a las que los pájaros carpinteros más grandes no pueden acceder. Visitan con avidez los comederos en busca de semillas y sebo. En invierno, se unen a grandes bandadas de carboneros y trepadores para buscar comida en el paisaje. En primavera y verano, anidan en las cavidades de los árboles, especialmente en la madera blanda o podrida que sus pequeños picos pueden excavar.
Estado
Los pájaros carpinteros de cuello de cisne son fácilmente los pájaros carpinteros más comunes y extendidos en la Commonwealth, y su disposición a utilizar los bosques jóvenes, los bosques maduros, o los suburbios arbolados ha asegurado que sus números siguen siendo fuertes. Los recuentos invernales de esta especie residente se mantienen estables o aumentan. Más información en el Atlas de aves reproductoras 2