Las copas llenas, los frutos gordos, la corteza gruesa: todas estas cosas describen un árbol sano. Pero, ¿qué ocurre cuando le falta una?
Si a su árbol le faltan trozos de corteza, puede que no parezca tan bueno. Pero, ¿significa que algo va mal?
Si ves que la corteza de tu árbol se está desprendiendo, ayúdale conociendo las causas -y las soluciones- a continuación.
¿Por qué mi árbol está perdiendo la corteza?
En general, es normal que un árbol pierda la corteza. Para algunas especies, como el sicomoro, el arce plateado y el abedul, la pérdida de grandes trozos de corteza es uno de sus encantos. Otros árboles, como el roble, el pino, el fresno y el arce, se desarrollan de dentro a fuera, por lo que la corteza más vieja de la parte superior se desprende para dejar espacio a la nueva.
Mientras haya una corteza sana debajo de las capas que se desprenden, su árbol está bien. Pero si ve estos otros signos, su árbol necesita un poco más de ayuda:
- La corteza se cae después de las heladas, lo que suele ocurrir en el lado sur o suroeste del árbol. Cualquier oscilación repentina de la temperatura puede hacer que los árboles desprendan la corteza y se agrieten por el estrés.
- La corteza se cae después de un calor excesivo, que, al igual que los daños por heladas, desprende la corteza hasta la madera.
- La corteza se cae de un árbol poco saludable, lo que significa que vería otros signos de estrés como cancros, savia u hojas y ramitas muertas.
Si la corteza se está cayendo de mi árbol, ¿se está muriendo?
Lamentablemente, no hay un sí o un no fácil para esta pregunta. Pero, si el árbol parece estar sano en general, es muy probable que sólo se esté descortezando para crecer. Si tu árbol ha perdido la corteza después de un incidente meteorológico inusual, normalmente puedes salvarlo con los siguientes pasos. La mayor cuestión es si detecta otros signos preocupantes que apunten a otros problemas mayores.
Qué hacer con la caída de la corteza de pinos, arces, robles o fresnos
Si la corteza se está pelando sin otros síntomas, es probable que se deba al estrés climático. ¡A los árboles estresados les encanta el agua y el mantillo! Así que hidrate el árbol cuando su suelo esté seco y aplique mantillo orgánico en primavera y otoño.
Si su árbol parece poco saludable, échele un vistazo más de cerca. Una serie de plagas y enfermedades de los árboles pueden afectar a su fresno, pino, roble o arce. Está el infame BEF, que se adentra en la madera del fresno, y la enfermedad de la mancha lisa, un hongo que ataca la capa exterior de la corteza del roble.
Si encuentra algún signo de plaga o enfermedad -polvo de aserrín, cancros rezumantes, hojas muertas o un hongo difuso- haga que un arbolista profesional lo revise. Él le dirá si puede tratar el problema o si necesita eliminarlo para mantener otras plantas de su propiedad fuera de peligro.