Hay muchas cosas que los hombres pueden hacer para mejorar la función eréctil. Muchas de ellas proporcionan también otros beneficios para la salud, por lo que tiene sentido probarlas.
Antes de considerar estos cambios en el estilo de vida, es útil recordar el papel del flujo sanguíneo del pene en la formación y el mantenimiento de una erección.
Cuando un hombre se estimula sexualmente, las arterias del pene se ensanchan y el tejido muscular liso se relaja. Como resultado, el pene se llena de sangre, lo que da a la erección su firmeza.
A menudo, la disfunción eréctil se produce cuando hay problemas con el flujo sanguíneo. Muchas de estas sugerencias mejoran el flujo sanguíneo, pero hay otros factores, como el daño nervioso, que pueden estar involucrados.
Ejercicio
Muchos hombres descubren que su función eréctil mejora cuando hacen ejercicio regularmente. El ejercicio ayuda a que la sangre fluya sin problemas, incluida la que llega al pene. Las investigaciones han demostrado que los hombres que son más activos físicamente tienen un menor riesgo de desarrollar disfunción eréctil.
Los hombres deben consultar a sus médicos antes de comenzar un programa de ejercicio regular para asegurarse de que el tipo de ejercicio que eligen es apropiado para ellos.
Mantener un peso saludable
La obesidad puede dañar los vasos sanguíneos que permiten que la sangre llegue al pene para una erección. Los estudios han demostrado que los hombres más pesados tienden a tener más problemas de erección, que pueden mejorar después de que los hombres pierdan peso.
La pérdida de peso también puede ayudar a la función eréctil mediante la disminución de la inflamación, el aumento de la testosterona, el alivio de la depresión y el aumento de la confianza.
No fume (o deje de fumar si lo hace)
Los estudios científicos han encontrado que los hombres que fuman son más propensos a desarrollar disfunción eréctil que los hombres no fumadores. Esta probabilidad parece aumentar con la cantidad de cigarrillos fumados a lo largo del tiempo. Los hombres que dejan de fumar suelen observar una mejora en su función eréctil.
Consuma una dieta saludable
Las investigaciones han demostrado que seguir una dieta mediterránea puede mejorar la función eréctil de algunos hombres. Esta dieta incluye frutas, verduras, cereales y aceite de oliva. La investigación también ha demostrado que los hombres sin disfunción eréctil eran más propensos a comer muchas frutas, verduras, frutos secos y pescado, y cereales integrales.
Controlar el azúcar en sangre y gestionar la diabetes
Muchos hombres con diabetes tienen problemas de erección. Un nivel elevado de azúcar en sangre puede dañar los vasos sanguíneos, los nervios y el tejido eréctil.
Los vasos sanguíneos pueden ser más susceptibles a la aterosclerosis -dureza de las arterias- en los hombres diabéticos. Esto significa que se acumulan placas en las arterias, lo que dificulta que la sangre fluya libremente hacia el pene y forme una erección.
El daño a los nervios, o neuropatía, puede causar problemas de señalización entre el cerebro y el pene. El cerebro de un hombre puede registrar la estimulación sexual, pero si el «mensaje» no llega al pene, habrá problemas de erección.
El alto nivel de azúcar en sangre también puede interferir en la producción de sustancias químicas necesarias para la erección, como el neurotransmisor óxido nítrico.
Otras sustancias químicas asociadas a la diabetes pueden endurecer el tejido eréctil, lo que provoca problemas en las válvulas y «fugas venosas.» Cuando esto ocurre, la erección no puede mantenerse porque la sangre se escapa del pene y vuelve al cuerpo.
Controlar la presión arterial
La presión arterial alta, o hipertensión, es una causa común de disfunción eréctil, ya que puede interferir con el flujo sanguíneo del pene.
Aunque es importante controlar la presión arterial alta, los medicamentos para esta condición también pueden afectar a la función eréctil. Parece que los medicamentos más antiguos, como los diuréticos y los betabloqueantes, son más propensos a tener efectos secundarios sexuales que los más nuevos. El médico de un hombre puede ayudarle a decidir las mejores opciones de tratamiento.
Controlar la depresión
La depresión está asociada a la disfunción eréctil, aunque no está claro si una causa directamente la otra. La depresión de un hombre puede provocar dificultades de erección. Sin embargo, la disfunción eréctil también puede hacer que se deprima.
No obstante, controlar la depresión puede ayudar a aliviar la disfunción eréctil. Es importante tener en cuenta, sin embargo, que algunos medicamentos comúnmente prescritos para la depresión, como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), tienen efectos secundarios sexuales. Es posible que un hombre tenga que probar diferentes medicamentos, con la orientación de un médico, para determinar cuál es el que mejor le funciona.
Mantenga su actividad sexual
En un estudio finlandés sobre hombres de entre 55 y 75 años, los hombres que mantenían relaciones sexuales menos de una vez a la semana tenían el doble de probabilidades de padecer disfunción eréctil que los que lo hacían una vez a la semana. Los investigadores concluyeron que las relaciones sexuales regulares protegen contra la disfunción eréctil.
Tenga cuidado al montar en bicicleta
Los hombres ejercen mucha presión sobre sus genitales al montar en bicicleta. La compresión del perineo (la zona entre el escroto y el ano) en el sillín de la bicicleta puede detener el flujo sanguíneo a esta zona, provocando dificultades sexuales. Se aconseja a los hombres que utilicen un sillín de bicicleta sin nariz, que ajusten su posición en la bicicleta para que haya menos presión sobre el perineo y que limiten el tiempo que pasan montando en bicicleta.