Una tos puede persistir después de la recuperación de la gripe por algunas razones diferentes.
Infecciones respiratorias
Además de la gripe, las siguientes infecciones pueden provocar una tos postviral:
- bronquitis
- el resfriado común
- el crup
- la neumonía
- la faringitis
- la bronquiolitis
- difficulty breathing
- chest tightness
- wheezing
- shortness of breath
- frequent throat clearing
- hoarseness
- a feeling that something is stuck in the throat
- airway inflammation
- gastroesophageal reflux disease, or GERD
- cough reflex sensitivity
- snoring
- daytime fatigue
- pauses in breathing
- memory and concentration difficulties
- irritability
- headaches
- dry mouth
Según una revisión de 2020, la tos postviral puede estar causada por un aumento de la sensibilidad de los receptores de la tos en el cuerpo o por una hiperrespuesta bronquial temporal.
Una investigación más antigua, de 2006, sugiere que la tos tiende a persistir tras la recuperación de la infección debido a una extensa inflamación en el revestimiento de las vías respiratorias.
También, observan los investigadores, si la tos se origina en las vías respiratorias inferiores, el exceso de producción de moco puede ser el responsable.
Otras afecciones médicas subyacentes
Mientras tanto, otros problemas de salud pueden hacer que la tos persista después de que una persona se haya recuperado de una infección.
En este caso, la tos está relacionada con la afección subyacente, no con la infección. En otras palabras, no es post-viral.
Asma
El asma hace que las vías respiratorias se inflamen y se vuelvan sensibles.
Si una persona con asma desarrolla la gripe, que luego provoca una inflamación adicional en las vías respiratorias, esto puede desencadenar ataques de asma o empeorar los síntomas del asma.
Las personas pueden no ser conscientes de que tienen asma. Como los síntomas pueden ser muy leves, puede ser fácil confundirlos con los efectos persistentes de una infección respiratoria, por ejemplo.
Otros síntomas del asma incluyen:
Laryngeal pharyngeal reflux
Laryngeal pharyngeal reflux (LPR) involves acid from the stomach traveling up through the esophagus and into the throat.
The acid tends to irritate and inflame the vocal cords, and a cough is a common symptom of this issue, according to the International Foundation for Gastrointestinal Disorders.
It may be difficult for someone with this reflux to distinguish the cause of their cough, as LPR often begins after an upper respiratory illness, the foundation reports.
Other symptoms of LPR may include:
Obstructive sleep apnea
According to 2015 research, obstructive sleep apnea (OSA) can cause a chronic cough. The connection remains unclear, but it may involve OSA causing:
Symptoms of OSA include: