Actualmente, los exámenes oculares regulares son la mejor forma de prevención contra los daños importantes del glaucoma.
La detección temprana y el tratamiento cuidadoso y de por vida pueden mantener la visión en la mayoría de las personas. En general, debe realizarse una revisión para detectar el glaucoma:
- antes de los 40 años, cada dos o cuatro años
- desde los 40 hasta los 54 años, cada uno o tres años
- desde los 55 hasta los 64 años, cada uno o dos años
- después de los 65 años, cada seis o 12 meses
Todas las personas con factores de riesgo elevados deben someterse a pruebas cada uno o dos años después de los 35 años. Las personas con mayor riesgo son los afrodescendientes, las personas con diabetes y las personas con antecedentes familiares de glaucoma. Se corre un mayor riesgo si se tiene un padre o un hermano con glaucoma.
El diagnóstico oportuno y el tratamiento adecuado son la clave para la prevención del glaucoma
Aunque no se conocen formas de prevenir el glaucoma, la ceguera o la pérdida significativa de la visión a causa del glaucoma pueden evitarse si la enfermedad se reconoce en las primeras fases. En su forma más frecuente, el glaucoma primario de ángulo abierto, la pérdida de visión es silenciosa, lenta y progresiva. Suele afectar primero a la visión lateral (visión periférica) y, a medida que avanza, se pierde la visión central.
Los medicamentos para el glaucoma ralentizan su progresión al reducir la presión intraocular (PIO) elevada para evitar que se dañe el nervio óptico. También existen tratamientos quirúrgicos.
Beneficios del ejercicio
Un programa regular de ejercicio moderado beneficiará su salud en general, y los estudios han demostrado que el ejercicio moderado, como caminar o correr tres o más veces cada semana, puede tener un efecto de reducción de la PIO.
Los beneficios del ejercicio duran sólo mientras se continúe haciendo ejercicio; por eso se recomienda el ejercicio moderado de forma rutinaria. El yoga puede ser beneficioso, pero es mejor evitar las posiciones invertidas, como las paradas de cabeza y las paradas de hombros, ya que pueden aumentar la PIO.
Hable con su médico si tiene preguntas o preocupaciones específicas sobre el inicio de un programa de ejercicios.
Proteja sus ojos
Utilizar gafas protectoras es importante cuando se realizan actividades deportivas o proyectos de mejora del hogar.
Las lesiones oculares pueden provocar un glaucoma traumático o un glaucoma secundario, por lo que proteger los ojos de las lesiones es otra forma de prevenir el glaucoma. Haga clic aquí para obtener más información sobre los diferentes tipos de glaucoma, o hable con su oftalmólogo.
Recuerde que los exámenes oculares integrales regulares son la mejor forma de prevención contra el glaucoma y otras enfermedades oculares.
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Artículo escrito por el Dr. Robert L. Stamper, Profesor Distinguido de Oftalmología Clínica y Director Emérito del Servicio de Glaucoma de la Universidad de California en San Francisco.