Salud sexual y reproductiva

Salud reproductiva y desarrollo

El FNUAP trabaja para que la salud y los derechos sexuales y reproductivos sigan siendo el centro del desarrollo. La Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo establece una clara conexión entre la salud reproductiva, los derechos humanos y el desarrollo sostenible. Cuando no se satisfacen las necesidades de salud sexual y reproductiva, se priva a las personas del derecho a tomar decisiones cruciales sobre su propio cuerpo y su futuro, con un impacto en cascada sobre el bienestar de sus familias y las generaciones futuras. Y dado que las mujeres tienen hijos, y a menudo también la responsabilidad de criarlos, las cuestiones de salud y derechos sexuales y reproductivos no pueden separarse de la igualdad de género. De forma acumulativa, la negación de estos derechos exacerba la pobreza y la desigualdad de género.

Preocupaciones principales

Las personas hacen cola frente a una clínica de salud reproductiva en Vietnam. ©UNFPA/Doan Bau Chau

La situación es más grave en los países en desarrollo, donde los problemas de salud reproductiva son una de las principales causas de enfermedad y muerte de mujeres y niñas en edad fértil. Las mujeres empobrecidas sufren de forma desproporcionada embarazos no deseados, abortos inseguros, muertes y discapacidades maternas, infecciones de transmisión sexual (ITS), violencia de género y otros problemas relacionados.

Los jóvenes también son extremadamente vulnerables, ya que a menudo se enfrentan a barreras de información y atención en materia de salud sexual y reproductiva. Los jóvenes se ven afectados de forma desproporcionada por el VIH, por ejemplo, y cada año millones de niñas se enfrentan a embarazos no deseados, lo que las expone a riesgos durante el parto o a abortos inseguros e interfiere en su capacidad para ir a la escuela. La salud reproductiva de los adolescentes es, por tanto, otro foco importante del trabajo del UNFPA.

El UNFPA también trabaja para prevenir y abordar las ITS, que se cobran un enorme precio en todo el mundo. Más de un millón de personas contraen una ITS cada día. Sin diagnóstico y tratamiento, algunas ITS, como el VIH o la sífilis, pueden ser mortales. Las ITS también pueden causar complicaciones relacionadas con el embarazo, como la muerte fetal, las infecciones congénitas, la sepsis y la muerte neonatal. Las ITS, como el virus del papiloma humano (VPH), pueden provocar enfermedad inflamatoria pélvica, infertilidad y cáncer de cuello uterino, una de las principales causas de muerte entre las mujeres.

Un enfoque del ciclo vital

La salud reproductiva es una preocupación de por vida tanto para las mujeres como para los hombres, desde la infancia hasta la vejez. Los datos demuestran que la salud reproductiva en cualquiera de estas etapas de la vida tiene un profundo efecto en la salud posterior. El FNUAP apoya programas adaptados a los diferentes retos a los que se enfrentan las personas en los distintos momentos de su vida, como la educación sexual integral, la planificación familiar, la atención prenatal y del parto sin riesgos, la atención postnatal, los servicios de prevención de las infecciones de transmisión sexual (incluido el VIH) y los servicios que facilitan el diagnóstico y el tratamiento tempranos de las enfermedades relacionadas con la salud reproductiva (incluido el cáncer de mama y de cuello de útero).

Para apoyar la salud reproductiva a lo largo de todo el ciclo vital, es necesario reforzar los servicios de diversos sectores, desde los sistemas de salud y educación hasta incluso los sistemas de transporte, que son necesarios para garantizar la accesibilidad de la atención sanitaria. Y todos los esfuerzos para apoyar la salud sexual y reproductiva dependen de la disponibilidad de suministros sanitarios esenciales, como los anticonceptivos, los medicamentos que salvan vidas y el equipo médico básico.

El trabajo de la UNFPA

El trabajo de la UNFPA para mejorar la salud sexual y reproductiva es un esfuerzo clave para lograr el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3, que exige buena salud y bienestar. También hace avanzar el Objetivo 5, que pide la igualdad de género, así como muchos de los otros objetivos incluidos en la Agenda 2030.

El UNFPA trabaja con los gobiernos, otros organismos de la ONU, la sociedad civil y los donantes para desarrollar esfuerzos integrales que garanticen el acceso universal a la atención de la salud sexual y reproductiva. El UNFPA aboga por integrar la prestación de estos servicios en la atención primaria de salud, para que sea lo más accesible posible. Esto significa, por ejemplo, que una mujer podría atender sus necesidades de planificación familiar, atención prenatal, pruebas del VIH y salud general en un solo lugar.

El FNUAP es uno de los principales proveedores de preservativos, que ofrecen una de las formas más eficaces de protección contra las ITS, incluido el VIH.

El FNUAP también trabaja con los gobiernos y las comunidades para fortalecer los sistemas de salud, lo que incluye el apoyo a la aplicación de programas de salud reproductiva, la mejora de la calidad de la atención de salud reproductiva y el fortalecimiento de los recursos humanos. El FNUAP también trabaja para garantizar que los productos de salud reproductiva estén disponibles donde se necesitan y que exista un sistema logístico que funcione. El Fondo Temático para la Salud Materna y los Suministros del UNFPA son solo dos ejemplos de la labor del Fondo en el fortalecimiento de los sistemas de salud y los servicios de calidad.

Al tiempo que fortalece los sistemas nacionales, el UNFPA también hace especial hincapié en aumentar el acceso de los grupos desfavorecidos, incluidos los jóvenes, los pobres de las zonas urbanas, las comunidades rurales, las poblaciones indígenas y las mujeres con discapacidad.

Actualizado el 16 de noviembre de 2016.

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