- En 1995, el artista Bryan Lewis Saunders comenzó a crear al menos un autorretrato de sí mismo cada día.
- En el año 2000, se le ocurrió un experimento titulado «Under The Influence» (Bajo la influencia), en el que tomaba una droga o intoxicante diferente cada día y luego se dibujaba a sí mismo.
- Le dijo a Insider que el experimento le dejó aletargado y con «un leve daño cerebral que no era irreparable», pero que le produjo «retraso psicomotor y confusión.»
- Aún así, dijo que «sigue llevando a cabo este experimento pero en lapsos de tiempo mayores», aunque en la actualidad sólo toma drogas que «me han sido recetadas por un médico».
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En marzo de 1995, el artista Bryan Lewis Saunders comenzó a crear al menos un autorretrato de sí mismo cada día.
Nacido en Washington D.C. pero que vive de forma intermitente en Tennessee, en el año 2000 se propuso buscar «experiencias que pudieran afectar profundamente a mi percepción de mí mismo», y dio con un experimento titulado «Under The Influence» (Bajo la influencia) que hizo precisamente eso.
«Cada día tomaba una droga o intoxicante diferente y me dibujaba a mí mismo bajo la influencia», afirma en su página web.
Fue protagonista de un documental llamado «Art of Darkness» sobre la experiencia -que, según dice, le dejó aletargado y con «daños cerebrales leves que no eran irreparables», lo que, según dijo a Insider, significaba «retraso psicomotor y confusión».»
Aún así, dijo que «sigue llevando a cabo este experimento pero en lapsos de tiempo más grandes y actualmente sólo tomo medicamentos que me prescribe un médico».
Le dijo a Insider que sus otros proyectos más recientes incluyen un experimento de dibujo en el que estuvo totalmente ciego durante 30 días seguidos y, por supuesto, creó un autorretrato diario.
«También he hecho otros experimentos de dibujo y vida de un mes de duración; sin oír, sin hablar y demás», dijo, y añadió que «actualmente está explorando la excitación y la energía». Desplázate hacia abajo para ver algunos de los dibujos más extraños, aterradores e increíbles que Saunders creó mientras se drogaba.