Qué hacer cuando te duele la boca o la garganta
Narrador:
Qué hacer cuando te duele la boca o la garganta durante la radioterapia.
Gina y Kim se conocieron en su grupo de apoyo contra el cáncer. Descubrieron que tenían mucho en común y ahora se reúnen todos los martes para comer. Escuchemos cómo Kim comparte algunos consejos con su amiga Gina.
Gina:
Me alegro de haber quedado contigo para comer hoy. El consejo que me diste la semana pasada sobre el enjuague bucal me ayudó mucho. Mezclo 1/4 de cucharadita de bicarbonato de sodio y 1/8 de cucharadita de sal en 1 taza de agua tibia. Luego me lo paso por la boca y lo escupo. Hago esto cada 1 o 2 horas durante el día, y está funcionando. También me cepillo muy suavemente con un cepillo de dientes suave y limpio después de cada comida.
Kim:
Me alegra saber que el enjuague con bicarbonato de sodio y sal te está funcionando, Gina. Sigue haciéndolo. Te ayudará a mantener la boca limpia y a sentirte mejor. Sabes, mi enfermera me dio algunos otros consejos que pueden ayudarte.
Gina:
¿Cómo qué?
Kim:
Bueno, mi boca se secó tanto que mi enfermera me dijo que usara un spray sustituto de la saliva. Me ayudó a humedecer la boca. También tomé sorbos de agua y chupé trozos de hielo para mantener la boca y la garganta húmedas.
Gina:
Tengo la boca terriblemente seca. ¿Este spray funciona?
Kim:
Sí, funciona. También lo hace comer alimentos blandos. Solía triturar los alimentos con un tenedor o ponerlos en la licuadora. Añadir salsa, caldo o yogur también puede hacer que la comida sea más fácil de tragar.
Oh, y seguí el consejo de mi enfermera de dejar de comer alimentos afilados, como las patatas fritas. También evité las tres «S» -alimentos salados, azucarados y picantes- y reduje las bebidas ácidas, como el zumo de naranja, limón y pomelo, que me hacen daño en la boca y la garganta.
Gina:
Hacer que los alimentos sean suaves y húmedos es una buena idea. Y creo que me mantendré alejada de los alimentos salados, azucarados o picantes, y de las bebidas ácidas.
Kim:
Estoy intentando recordar cualquier otro consejo de mi enfermera…. Oh, casi me olvido de lo más importante. Me acostumbré a revisarme la boca todas las mañanas y a avisar a mi enfermera de cualquier cambio en cuanto lo notara. De este modo, los pequeños problemas no se convirtieron en grandes.
Gina:
Eso parece factible.
Kim:
Sólo recuerde que si le sigue doliendo la boca, pregunte a su médico sobre los medicamentos para el dolor. No aguantes el dolor que no tienes que aguantar. ¿Vale?
Gina, tengo hambre. Vamos a pedir. Hay muchas opciones en el menú que no te harán daño en la boca.
Gina:
Sí, pensé que empezaría con mi favorita, la sopa de brócoli, tal vez un puré de patatas. Me encantan.
Resumen del narrador:
El dolor de boca no es divertido. Pruebe a enjuagarse con la mezcla de bicarbonato y sal que Gina encontró tan útil. Sólo mezcle 1/4 de cucharadita de bicarbonato de sodio y 1/8 de cucharadita de sal en 1 taza de agua tibia. Remuévelo. A continuación, métetelo en la boca y escúpelo. Hazlo cada una o dos horas durante el día. Así mantendrás la boca limpia. Lo mismo ocurre con el cepillado después de cada comida.
Evita los alimentos con las tres «S»: alimentos salados, azucarados y picantes. Y no tomes bebidas ácidas como el zumo de naranja, limón o pomelo si te hacen daño en la boca o la garganta.
Y recuerda que no tienes por qué aguantar las llagas en la boca y el dolor de garganta. Llame a su médico y pida un medicamento que pueda ayudarle.