La hora de la cara
La hora de la mamá se recomienda para todos los bebés, pero a menudo no es muy bien recibida por los participantes que todavía están trabajando en el control muscular y la coordinación necesaria para levantar la cabeza.
Para algo diferente, coloca al bebé sobre tu pecho y háblale o cántale canciones. Cuando tu voz les anime a levantar la cabeza, serán recompensados con una mirada a tu sonrisa. El contacto físico y la cercanía pueden hacer que la hora de la barriga sea una experiencia más agradable para todos.
Y aunque el tiempo boca abajo no sea su momento favorito, es una actividad diaria importante para los recién nacidos, que suelen pasar la mayor parte del tiempo reclinados. Un investigador de un estudio observó que la posición en la que se encuentra un bebé afecta a su capacidad para interactuar con el mundo y, por tanto, afecta a su desarrollo.
Diversión mientras se dobla
Lavado de ropa. Lo más probable es que hagas mucha colada con un pequeño en casa. El tiempo que dedicas a esta tarea puede ser también tiempo dedicado a tu bebé. Lleva una manta o un moisés cerca mientras te dedicas a abordar la pila de ropa.
El proceso de doblar la ropa puede estimular los sentidos: los colores de las camisas, la corriente de aire al sacudir una toalla, el obligado juego del cucú al levantar y soltar una manta. Una vez más, puedes hablar con el bebé sobre los colores, las texturas y el uso de las distintas prendas. (Toca esta manta suave. ¡Mira, es la camisa azul de papá!)
Estira, pedalea y hazle cosquillas
Coloca al bebé sobre una manta y ayúdale a moverse. Sujeta suavemente sus manos mientras mueves sus brazos hacia arriba, hacia los lados y alrededor. Aprieta un poco esos adorables dedos de los pies y pedalea sus piernas (¡esto también es genial para los bebés con gases!). Los masajes suaves y las cosquillas desde la planta de los pies hasta la parte superior de la cabeza pueden resultar divertidos para ambos.
También es un buen momento para introducir algunos juguetes sencillos. Un sonajero, un peluche de gran contraste o un espejo irrompible son buenas opciones. Sujétalos lo suficientemente cerca para que tu bebé se concentre, habla de lo que estás haciendo y dale la oportunidad de alcanzar y tocar los objetos mientras juegas.
Baila conmigo
Como te puede decir cualquier padre que haya mecido y rebotado y conducido en círculos, a los bebés les encanta el movimiento y lo encuentran relajante. Siempre puedes acunar al bebé en tus brazos, pero esta es una actividad en la que llevar al bebé funciona especialmente bien.
Ponga música y lleve a su pequeño en brazos o en un cabestrillo. Puedes bailar y rebotar en el salón, pero también puedes dedicar algo de tiempo a ordenar la casa o hacer algunas llamadas telefónicas mientras te mueves y te mueves con tu pequeño.
Leer en voz alta
A estas alturas, tu bebé no es capaz de exigirte que le leas «Hop on Pop» por 34.985ª vez. Simplemente les gusta escuchar tu voz. Así que si has trasnochado con tu pequeño noctámbulo y estás desesperado por leer ese artículo sobre el sueño de los recién nacidos, hazlo.
Se trata más de la inflexión -cómo lo dices- que del contenido -lo que dices-. Así que lee lo que quieras, pero léelo en voz alta. Está demostrado que la lectura temprana y frecuente favorece el desarrollo del cerebro, aumenta la velocidad de procesamiento y el vocabulario.
Canta una canción
Ya sea una nana a la hora de dormir o un poco de rock al ritmo de Lizzo en el coche, anímate a cantarla. Tu bebé no va a juzgar tu tono; simplemente le gusta el sonido familiar de tu voz.
Esto también resulta útil cuando te cuelas en la ducha con un bebé inquieto que espera impaciente. Lleva una silla de bebé al baño y pon un concierto improvisado mientras te lavas el pelo.
Tómate un descanso
No tienes que estar «encendida» durante todas las horas de vigilia de tu bebé. Al igual que los adultos pueden beneficiarse de algún tiempo de inactividad, los bebés necesitan un equilibrio entre la estimulación y el tiempo de tranquilidad para procesar su entorno.
If your baby is awake and content, it’s perfectly OK to let them hang out in their crib or in another safe spot while you get some well-deserved time for yourself.